Aunque no sea excesivamente habitual, a veces, puede ser útil añadir algún texto a nuestras fotografías, bien sea un título o una marca de agua.
Veamos cómo se hace en Gimp.
- Lo primero, es elegir, en la barra de herramientas, la herramienta de texto, simbolizada por la letra A.
- Seguidamente, hacemos clic, y, sin soltar, trazamos un rectángulo en la imagen, ocupando, aproximadamente, el área que queremos que ocupe el texto, aunque eso, siempre lo podremos readaptar, fácilmente, estirando de los cuadrados que hay en las esquinas del área de texto.
- Seguidamente, ya podemos escribir. Ocurre que, dependiendo del tamaño de la fotografía, es posible que el texto se vea diminuto. No pasa nada. Lo podemos agrandar seleccionándolo y eligiendo un tamaño más grande en el recuadro correspondiente. Si el texto es tan pequeño que cuesta seleccionarlo, podemos usar la lupa (en la barra de herramientas) para agrandar la vista de imagen.
- En el ejemplo de arriba, hemos usado un tamaño de fuente de 500. Ya vemos que, adjunta, aparece una pequeña barra de herramientas que nos ofrece la posibilidad de elegir el tipo de letra, el tamaño, el espaciado (horizontal y vertical), y opciones de cursiva, negrita, subrayado, tachado, color de letra...
- Además, si hacemos doble clic en la herramienta texto de la barra de herramientas, se abre el empotrable de propiedades del texto, donde podemos elegir algunas opciones más, como justificación, poder editar el texto en una ventana de edición independiente,tabulación, etc.
- También, podemos acudir al empotrable capas. En él, veremos que, al escribir el texto, se añade, de manera automática, una nueva capa, simbolizada por una T. A esta capa le podemos modificar la opacidad, y la podemos desplazar, con la herramienta mover, por la imagen, como cualquier otra capa.
- Debajo vemos cómo hemos cambiado el color de la letra a blanco y hemos bajado su opacidad.
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